sábado, 26 de noviembre de 2011

TEORIA CUALITATIVA DE LA MONEDA

El dogma liberal se ha basado siempre en la teoría cuantitativa. Para ella el valor de la moneda es homogéneo e igual en toda nueva emisión, y por tanto sea cual sea el destino de la creación de moneda, siempre esta creación favorece la inflación. Por ello la teoría de Friedman tiende sistemáticamente a restringir el crédito y controlar por tanto la 'expansión' de la economía.
Para la teoría cualitativa de la moneda sostiene que el nivel de precios P no depende tanto de la cantidad de moneda M como de la calidad del uso de la nueva creación de moneda. De forma que si se genera moneda con fines productivos no solo no es inflacionaria esta nueva moneda sino incluso puede ir contra la inflación.
Esta diferencia tiene repercusiones enormes en todo el proceso económico. Frente a la restricción del crédito, los altos intereses y consecuentemente el nivel del paro alto ligado al nivel alto del interés del dinero (dificultades a la inversión), la aplicación cualitativa de la moneda indica que crear dinero por parte del Estado (dar créditos baratos) es precisamente la mejor cura para la recesión y el paro SI ESE CREDITO SE ASIGNA CUALITATIVAMENTE A PROCESOS PRODUCTIVOS.
Todo ello no solo lleva a controlar el paro y reactivar la economía, sino también a abaratar el dinero evitando las deudas inmensas del Estado. Y solo exige una cosa: que el dinero favorezca las actividades productivas.
Los problemas por los cuales el mundialismo liberal se niega a aplicar estas fáciles conclusiones son básicamente:

* Abaratar el crédito va contra los intereses de la finanza mundial. Si los Estados generan dinero no lo piden a la Banca mundial y no se endeudan, con lo que la finanza pierde el control político de los Estados.
* La clase política está interesada en usar el dinero en gastos electoralistas, en gastos públicos 'no productivos'.
* El derroche y la malversación de fondos públicos hace que el uso del dinero creado por el Estado en factores realmente productivos (orientándolos a la empresa privada) vaya contra el deseo político de las partidocracias de gastarlo en paliar el déficit público generado por el malgasto, la corrupción y la mala administración.
* La teoría liberal de que no se puede favorecer un sector frente a otro (horror al intervencionismo estatal político) domina las mentes de los economistas oficiales.

No hay comentarios:

Publicar un comentario